DEDICADO A ANGEL-LUIS Y MONTAÑA
Con vuestra invitación y regocijo
hoy venimos a acompañaros con vuestros padres,
hermanos, familiares, amistades y amigos,
a vuestro enlace matrimonial y solo por ello
os voy a explicar, ya que no me atrevo aconsejar,
porque muchos obstáculos en esta vida de matrimonio,
os habrán dicho vuestros padres, que os podréis encontrar,
y los dos juntos con respeto, tendréis que discutirlo
sí por las buena, lo queréis solucionar,
Ya que en la vida matrimonial para estar unido
muchos años, hay mucho que transigir y perdonar,
siempre con mucho amor y cariño
si os queréis de verdad,
aunque eso hoy al firmar vuestro contrato de casamiento
y en la Iglesia, lo habéis demostrado ya.
Pero al daros nuestra enhorabuena, lo
que os hemos querido demostrar,
es, en el aprecio que os tenemos,
para que con nosotros podáis contar,
ya que la familia para nosotros,
es lo principal y esperamos que no os haga falta,
en las cosas que no sean alegres, el tenéroslo,
que demostrar.
Porque lo que de verdad os deseamos
es que lleguéis unidos como nosotros,
y con buena salud, a vuestra boda de oro,
y solo por ello, ya habréis obtenido un gran tesoro.
No solo económicamente, que sería lo ideal,
sino con vuestros hijos y nietos que será lo más normal,
aunque no os dejen de dar algún pequeño disgusto
que enseguida, se os pasara,
por la alegría que nos dan los niños
en el hogar donde se crían o en la casa donde están
y orgullosos de haberlos tenidos,
de felicidad, os colmaran.
Porque si a vuestro matrimonio
habéis ido, con la verdad
con alegría y amor,
Dios y su Madre os darán su bendición.
Cáceres a 30 de Octubre 2.010
Montánchez
Benito y Luisa
0 comentarios